Respaldan decisiones del Comité Político
Santo Domingo.- El bloque de diputados del Partido de la Liberación Dominicana (PLD) respaldó en todas sus partes, las decisiones tomadas y anunciadas por el Comité Político del PLD en la reunión de este domingo 6 de septiembre.
En ese contexto los diputados peledeistas se unieron al pedido del órgano de dirección partidaria, en el sentido de escoger una Junta Central Electoral independiente, la permanencia como miembros del Comité Central de los legisladores y legisladoras salientes a partir del 16 agosto, y el cese de denuncias infundadas contra ex funcionarios del pasado gobierno.
“Nosotros los diputados del PLD manifestamos nuestro más enérgico rechazo a la manera alegre en que los nuevos funcionarios del gobierno del PRM se destapan con denuncias que no se sostienen, ni resisten el más mínimo análisis objetivo de las cosas”, expresó Gustavo Sánchez, vocero de los diputados del PLD.
Los congresistas dejaron claro que de ninguna manera se oponen a que las nuevas autoridades investiguen y encaminen por las vías correspondientes cualquier inconducta encontrada.
Deploraron que en medio de los 100 días de gracia al nuevo gobierno, las autoridades desaten una campaña de descredito, con pronunciamientos y denuncias insostenibles, que solo buscan dañar honras y crear un ambiente de incertidumbre y mala vibra, en momentos en que se requiere de la unidad nacional para enfrentar los grandes males generados por la pandemia.
Advirtieron al PRM y al gobierno que con ese tipo de denuncias irresponsables se prostituye y desacredita cualquier esfuerzo que se quiera hacer por la transparencia, afectando además la imagen del país a nivel internacional.
El Bloque de Diputados del PLD cuestiona los pronunciamientos ligeros del Director de Presupuesto, José Rijo, quien afirmó que en la transición se pagaron 21 mil millones de pesos sin sustento, acción que entienden es imposible con los niéveles de controles del Estado.
Afirmaron que ese tipo campaña negativa no sólo dañan honras, sino que afectan la credibilidad del país, ante organismos crediticios y calificadores de riego, espacios a los cuales las nuevas autoridades se verán compelidas a tocar sus puertas próximamente.