MINNEAPOLIS (AP) — Lo único que Stephen Curry pudo hacer fue observar desde la banca de Golden State mientras que los suplentes de Minnesota tomaban el control en el cuarto periodo.
Los Warriors cayeron a puestos de peligro para la postemporada y están teniendo problemas para encontrar su lugar en esta posición poco conocida.
Iniciando una serie de cinco duelos en ocho días, el entrenador Steve Kerr ejerció precaución con el base que ha sido elegido 10 veces al Juego de Estrellas y extendió el periodo de descanso para el jugador de 36 años en el cuarto periodo. Los Timberwolves en ese momento, coincidencia o no, tenían ventaja de 12 puntos en su ausencia el domingo.
Para cuando Curry regresó a la duela a 6:54 minutos del final, los Warriors tenían desventaja de ocho unidades y terminaron perdiendo 114-110 ante Wolves, su sexta derrota en nueve duelos. En la derrota ante Indiana el viernes, Curry disputó 35 minutos.
“Tenemos aquí grandes jugadores, entonces no podemos esperar tener a Curry juego tras juego. Estas últimas semanas han sido difíciles para él. Hemos puesto la carga del equipo sobre sus hombros por 15 años. No podemos esperar que juegue 35 minutos”, aseguró Kerr. “Si quieren decir que la diferencia entre jugar 30 o 32 minutos es la diferencia entre ganar y perder, estoy en desacuerdo. Estamos intentando ganar. Intentamos también mantenerlo bien”.
Curry reconoció sentirse sorprendido por quedarse más tiempo en la banca, pero también pareció entender a qué se refiere Kerr.
“Disputé todo el cuarto periodo ante Indiana… eso no funcionó. Esto no funcionó. Entonces tenemos que encontrar un punto medio”, dijo Curry con una sonrisa.
Los Warriors (36-34) están un juego por encima de Houston en el décimo lugar y con un boleto al mini-torneo de la Conferencia Oeste.
“La situación quedará definida claramente y será en tiempo real”, añadió Curry “Cada partido importa. Nos estamos acercado a la parte baja de la clasificación y en donde nunca creímos estar, entonces nadie va a sacar la bandera blanca y decir que nos estamos rindiendo. Si eso significa disputar más minutos, estaré listo para eso”.
Esta ha sido una temporada complicada para los Warriors en la cancha que tuvieron que lidiar con dos suspensiones de Draymond Green y la repentina muerte del asistente Dejan Milojević. Están muy lejos de ese cuarto título en ocho años que ganaron en el 2022.
“Para ganar tenemos que construir buenos hábitos”, sentenció Green. “No creo que tengamos buenos hábitos”.