Redacción Internacional. – Durante los últimos seis meses el comercio de diamantes en los centros mundiales de Amberes y Bombay se ha visto paralizado debido a la expansión de la pandemia. Ahora que la demanda muestra signos de recuperación, los mayores mineros de la industria rebajan los precios de algunas de sus piedras.
Tras haberse negado a reducir el valor de los diamantes durante la mayor parte de la pandemia, la empresa sudafricana De Beers y su rival rusa Alrosa creen que los signos de recuperación de la demanda son suficientes para poder bajar los precios de algunas de sus piedras casi un 10 %.
El impacto de esta jugada fue instantáneo, ya que los compradores de diamantes en bruto gastaron unos 500 millones de dólares para llenar sus reservas, destacaron a la agencia Bloomberg unas fuentes cercanas al asunto.
A finales de agosto De Beers probablemente ha vendido diamantes en bruto por un valor de 300 millones de dólares, calculan los interlocutores del medio. Esta suma representa la mayor oferta no registrada desde febrero y supera en unas seis veces sus ventas totales realizadas en todo el segundo trimestre del 2020. La compañía habría vendido más si no se hubiese visto obligada a retener algunas de sus operaciones para evitar que la incipiente recuperación no fuese tan abrumadora.
Si bien uno de los directivos de Alrosa, Evgueni Aguréyev, se negó a comentar el volumen de ventas de su empresa, los compradores estiman que el gigante ruso probablemente ha vendido piedras preciosas por un valor de casi 200 millones de dólares durante el mismo plazo.
En agosto el mercado de diamantes en bruto mostró claros signos de recuperación después de haber pasado meses congelado. Sin embargo, este aún no ha alcanzado los niveles prepandémicos, ya que «los factores externos, incluidas las restricciones a los viajes internacionales, siguen pesando sobre él», señaló.
Ahora la recuperación en la industria de diamantes, según Bloomberg, es desigual. Las piedras preciosas de alta calidad utilizadas por sí solas o como parte de los anillos de boda son las que gozan de la mayor demanda. Fue el precio de esta clase de diamantes el que fue rebajado por De Beers.
Mientras, las joyas de baja calidad siguen otro camino, ya que los minoristas y los comerciantes muestran poca demanda. Por ello la empresa con sede en Johannesburgo rechazó rebajar su valor y admitió que podría vender pocas en el futuro como consecuencia de esta negativa. De lo contrario, la compañía habría tenido que reducir su precio un 20% para poder encontrar compradores, señalaron los interlocutores del medio.
¿Qué tendencias predominan en el mercado?
De Beers se atrevió a revalorar sus productos después de que la joyería estadounidense Tiffany & Co. anunciase una mejora en sus ventas mensuales animando a quienes piensan que la industria está en forma.
En el segundo trimestre, su negocio en Asia y en el Pacífico registró beneficios que podían equipararse con los del año anterior, mientras que sus ganancias en EEUU fueron a la baja, lo que la llevó a registrar pérdidas en uno de sus mayores mercados.
Este país norteamericano tradicionalmente se atribuía casi la mitad de toda la demanda de diamantes del mundo. Ahora, su mercado sigue estando en horas bajas, ya que la pandemia mantiene las joyerías cerradas, millones de personas están en el paro y los economistas registran la mayor contracción económica trimestral desde la Gran Depresión.
Se espera que los recientes cambios en la demanda en otras partes del mundo traigan alivio a las cadenas de suministro que se han visto paralizadas desde el inicio de la pandemia.
«Lo peor, creo, ya ha pasado, y hay razones para pensarlo (…) La industria está en una situación mejor de la que ha estado en mucho tiempo», señaló Stephen Lussier, jefe de consumo y marcas de la De Beers.
Las pequeñas empresas familiares que cortan, pulen y comercializan las piedras desempeñan un papel importante en la industria: forman un vínculo invisible entre las minas africanas y las joyerías de Nueva York, Londres y Hong Kong. Es un negocio secreto que existe fuera de la industria cerrada, pero su fortuna a menudo sirve de indicador de cómo le van las cosas en general. Los minoristas, a su vez, son otra fuerza que determina el destino del mercado global de diamantes, señala Bloomberg.
El mercado chino parece haber recuperado su ímpetu después de que Chow Sang Sang, uno de los mayores minoristas de joyería del país, comunicase que sus ventas internas en junio alcanzaron el 95% de las del 2019. Esa recuperación fue fruto de la incapacidad de los chinos de viajar al extranjero, donde tradicionalmente han gastado grandes recursos para comprar diamantes. Fuente: MundoSputnik