Santo Domingo. – El Ministerio Público reveló que la investigación penal del caso Calamar habría generado tensiones y ajustes internos en el presunto esquema de sobornos que operaba dentro del Seguro Nacional de Salud (SeNaSa), según consta en la solicitud de medida de coerción del caso Cobra.
De acuerdo con el documento, la imputada Cinty Acosta Sención decidió dejar de canalizar pagos ilícitos a través de José Pablo Ortiz Giráldez luego de que este fuera incluido como investigado en el proceso Calamar. La acusación sostiene que Acosta comunicó directamente al exdirector de SeNaSa, Santiago Hazím, que no continuaría utilizando a Ortiz Giráldez como enlace para la entrega de los sobornos.

Reclamos y presiones internas tras estallar el caso Calamar
El Ministerio Público detalla que, tras hacerse pública la investigación contra Ortiz Giráldez en 2022, el imputado Eduardo Read Estrella increpó a Hazím por la situación. Según la acusación, Read Estrella insistió en que debían mantener el flujo de pagos hacia Ortiz Giráldez, recriminándole que “a los amigos no se abandonan”.

La solicitud de medida señala que Read presionó a Hazím para continuar las entregas, ya fuera mediante facturación a nombre de empresas no vinculadas a Ortiz Giráldez o, en su defecto, mediante pagos en efectivo.
El Ministerio Público sostiene que estos movimientos evidencian la continuidad del esquema de sobornos pese a la exposición mediática y judicial del caso Calamar, y forman parte de los elementos que sustentan la acusación por corrupción y lavado contra los involucrados en el expediente Cobra.
