Washington (EFE). – El secretario general de la OTAN, Jens Stoltenberg, calculó este lunes que 23 de los 32 miembros de la alianza atlántica gastarán este año al menos el 2 % de su producto interior bruto (PIB) en defensa, un porcentaje que cumple el objetivo marcado.
“Esto es bueno para Europa y para Estados Unidos”, dijo en Washington en un coloquio en el centro de pensamiento Wilson Center.
Stoltenberg inició este lunes un viaje por Estados Unidos y Canadá en el que hoy mismo se reunió en la Casa Blanca con el presidente estadounidense, Joe Biden, a quien le comunicó esas nuevas cifras en el gasto en materia defensiva.
Hace solo cinco años, según recordó, menos de diez integrantes de la alianza gastaban el 2 % de su PIB en defensa: “Los europeos están haciendo más por su seguridad colectiva que hace solo unos años”, se congratuló.
La industria estadounidense
Según datos de hace un año, Polonia y Estados Unidos son los que más porcentaje de PIB dedicaban a la defensa.
Stoltenberg añadió que en los últimos dos años más de dos tercios de las compras europeas de defensa se hicieron con empresas estadounidenses. “Así que la OTAN es buena para la seguridad estadounidense, la industria estadounidense y el empleo estadounidense”, dijo.
El aumento del gasto, según añadió al inicio de su reunión con Biden, “demuestra que los aliados europeos y Canadá realmente están dando un paso al frente y asumiendo su parte de la responsabilidad común de protegernos a todos en la alianza de la OTAN”.
España el que menos invierte en defensa
España destinará a la inversión militar el 1,28 % de su producto interior bruto en 2024, lo que lo situará como el país de la OTAN que menos proporción de su PIB gastará en defensa este año, según los datos provisionales publicados este lunes por la Alianza.
Cerca de las cifras españolas se sitúan Eslovenia y Luxemburgo (1,29 % del PIB en ambos casos) y Bélgica (1,30 %).
El dato de España, no obstante, supone un incremento frente al 1,19 % que destinó a la defensa el año pasado, según la estimación de la organización transatlántica.
La Alianza pronostica que los aliados europeos y Canadá destinarán a la defensa este año el 2,02 % de su PIB, por encima del 1,78 % de 2023 y del 2 % que los aliados se habían comprometido a alcanzar este 2024 en la cumbre de mandatarios de la OTAN celebrada en Gales en 2014.
En la reunión celebrada en Vilna el año pasado, los mandatarios de los países aliados actualizaron ese objetivo y se comprometieron a destinar al menos el 2 % del producto interior bruto a las fuerzas armadas. De ese modo, el 2 % se convertía en un mínimo.
Su visita a Washington precede la cumbre
Tiene lugar además después de que el viernes los ministros de Defensa de la OTAN acordaran un plan para que la alianza lidere la coordinación de las iniciativas de adiestramiento de las fuerzas ucranianas y de la ayuda militar internacional que Kiev recibe para defenderse de la invasión rusa iniciada en febrero de 2022.
“Puede parecer una paradoja, pero el camino para la paz es que haya más armas para Ucrania”, sostuvo Stoltenberg, que espera que los compromisos que se asuman en esa cita “reduzcan la carga sobre Estados Unidos y fortalezcan el apoyo a Ucrania”.
Stoltenberg agradeció a Biden que Estados Unidos albergue ese encuentro y su compromiso personal con la alianza, y subrayó que Ucrania será miembro de la misma cuando haya consenso al respecto.
“Mientras tanto, estamos construyendo el puente que acerque al país. Debemos asegurarnos de que la agresión de (el presidente ruso, Vladímir) Putin no dé sus frutos ni hoy ni en el futuro. Por eso en la cumbre seguiremos acercando cada vez más a Ucrania a la adhesión, para que cuando llegue el momento pueda ingresar sin demora”, afirmó en Washington.
La postura sobre China
El secretario general de la OTAN recalcó además la necesidad de que China pague las consecuencias de su estrategia respecto a la guerra entre Kiev y Moscú.
“China está alimentando el mayor conflicto armado en Europa desde la Segunda Guerra Mundial y, al mismo tiempo, quiere mantener buenas relaciones con Occidente. Pekín no puede tener las dos cosas y en algún momento, a menos que cambie de rumbo, los aliados tendrán que imponer un coste”, concluyó.
Biden, a su vez, celebró que con 23 de los 32 miembros en camino de cumplir el objetivo fijado se marque un récord, recalcó que se ha duplicado la cifra existente cuando él llegó al poder en enero de 2021 y dijo estar deseando que la cumbre de julio permita seguir avanzando a partir de ese progreso.
Fuente: EFE