Un día como hoy del 2002, falleció a los 95 años, el expresidente Joaquín Balaguer Ricardo, quien gobernó la República por 22 años, de los cuales, 12 fueron de forma ininterrumpida (1966-1978).
Tras la muerte del nonagenario, su organización política, el Partido Reformista Social Cristiano (PRSC), ha caminado hacia la disipación: en las recién pasadas elecciones del domingo 5 de julio, el partido del gallo colorado sacó sin alianzas 1.80%, según la Junta Central Electoral (JCE), lo que lo deja fuera de la categoría de partido mayoritario.
Los mandatos del también abogado y escritor están marcados por luces y sombras: Se caracterizó por realizar un programa de construcción de puentes, viviendas, monumentos e hidroeléctricas. Sin embargo, fue criticado por represiones y asesinatos durante los llamados “Doce años”.
El primer gobierno de Balaguer llegó en 1960, cuando tomó la Presidencia en sustitución de Héctor Bienvenido, hermano de Rafael Leonidas Trujillo, luego de que la Organización de Estados Americanos (OEA) convenciera al dictador de que no era apropiado tener a un miembro de su familia como presidente.
Comenzó los conocidos “Doce años”, en 1966, cuando derrotó al profesor Juan Bosch, del Partido Revolucionario Dominicano (PRD), en las elecciones del 1 de junio. El tercer mandato fue entre 1986 y 1996, cuando ganó a Jacobo Majluta, candidato también del PRD.
En los 1970 y 1974, tras la exclusión de la prohibición constitucional para un segundo mandato presidencial, Balaguer logró la reelección sin mucha oposición, puesto que en ese periodo se puso en marcha la “Banda colorá”, encargada de buscar y reprimir a los opositores.
En 1987, el PRD se alistó y llevó a Antonio Guzmán Fernández como candidato para las elecciones, las cuales estuvieron bien observados por los Estados Unidos y su presidente Jimmy Carter, para evitar un “amañamiento” por parte del caudillo, como lo había hecho en las elecciones anteriores.
Guzmán se impuso con el 52.36% de 1,655,807 personas que votaron en esas elecciones y Balaguer tuvo que aceptar su fracaso.
En 1982, el PRD le repite la dosis con Salvador Jorge Blanco, quien logra mayoría absoluta en ambas cámaras.
Los restos de Joaquín Balaguer cuando eran bajado del Palacio Nacional
En 1986, tras la alianza del Partido Reformista con el Partido Revolucionario Social Cristiano, para formar el Partido Reformista Social Cristiano (PRSC), Balaguer (41.55%) regresó al poder tras derrotar a Jacobo Majluta (39.22%), quien acudió con un PRD dividido, y a Juan Bosch (17.92%), del Partido de la Liberación Dominicana (PLD).
Cuatro años más tarde, en 1990, Balaguer (35.35%) se impuso de forma cerrada al profesor Juan Bosch (33.79%).
En 1994, en unas elecciones amañadas se impuso con el 42.29% de los votos a José Francisco Peña Gómez y el PRD, que logró 41.55%. Este último indicó fraude y llamó a huelga general. Eso provocó fuerte presión internacional sobre Balaguer y tuvo que modificar la Constitución para prohibir la reelección, reducir su mandato a dos años y convocar elecciones en 1996, ganadas por Leonel Fernández y el PLD, con su apoyo.
Pese a tener una edad avanzada que ya le había pasado factura a su salud, su adicción al poder lo llevó a candidatearse otra vez en el 2000, pero perdió ante Hipólito Mejía y el PRD, quien se impuso con el 49.87% de los votos.
El 14 de julio de 2002, mientras estaba postrado en la clínica Abreu, a Balaguer le dio un paro cardiaco que le provocó la muerte.
Sus restos fueron sepultados el 18 de julio, pasado las 12:00 de la noche, tras un recorrido que tardó más de 12 horas, desde su residencia de la avenida Máximo Gómez hasta el cementerio Cristo Redentor.
Balaguer desarrolló una carrera literaria a la par con la de la política. Dejó un legado bibliográfico con el desarrollo de la poesía, historias, críticas literarias, ensayos, discursos y biografías.