Santo Domingo.- Durante la primera palabra del Sermón de las Siete Palabras, “Padre, perdónalos que saben lo que hacen”, Monseñor José Amable Durán Tinero, deploró el aborto, la violencia en niños y mujeres, los crímenes que quedan impugnen y las condiciones inhumana en que viven los privados de libertad.
Además, reprochó que existe una gran masa empobrecidas por “las injusticias de los depredadores del erario público y los que engordan evadiendo impuestos para acumular y amasar grandes fortunas”.
La Iglesia Católica entiende que Jesús sigue siendo vendido, humillado, golpeado y crucificado en los millones de no nacidos que han sido muertos “cruelmente” en el vientre de su madre.
“En los millones de no nacidos, porque han sido cruel y vilmente asesinados en el vientre de sus propias madres, o tratados como simples objetos de experimento, incapaces siquiera de lanzar un grito o una mirada de dolor que detenga la mano criminal de sus verdugos”.