San Francisco de Macorís. – El Hospital Regional Universitario San Vicente de Paúl, un centro de salud clave en la provincia Duarte, enfrenta serias críticas por las deplorables condiciones de infraestructura y atención médica que afectan a millas de pacientes. Este hospital, que debería atender a una población de escasos recursos en el nordeste del país, ha sido objeto de numerosas denuncias que evidencian una crisis en el sistema de salud pública.
Durante una visita reciente de la periodista Nuria Piera, se constató que el hospital no solo presenta un estado de abandono y suciedad, sino que también carece de equipos médicos esenciales. Pacientes y familiares han compartido experiencias desgarradoras, incluyendo la pérdida de seres queridos debido a la falta de atención oportuna. La ausencia de un banco de sangre y la escasez de insumos médicos han llevado a muchos a dependientes de donaciones, que a menudo llegan en mal estado o están a punto de vencer.
El director del hospital, Rafael Apolinar, admitió que, a pesar de recibir un presupuesto mensual de aproximadamente 12 millones de pesos, la calidad de la atención no se refleja en los servicios ofrecidos. La falta de un laboratorio funcional y la inoperatividad de equipos portátiles de rayos X son solo algunas de las deficiencias que se han documentado. Además, se ha señalado que el médico personal no cumple con sus horarios, lo que agrava la situación.
A pesar de que el hospital cuenta con una nómina de más de 1,000 empleados, incluidos alrededor de 600 médicos, la atención no se traduce en un servicio de calidad. Las salas de cirugía operan a menos de la mitad de su capacidad, y el director no tiene acceso a datos precisos sobre la cantidad de cirugías realizadas, lo que sugiere una falta de gestión y planificación.
La situación en el Hospital San Vicente de Paúl es un reflejo de los problemas más amplios que enfrenta el sistema de salud en la República Dominicana. Las autoridades deben tomar medidas urgentes para abordar estas deficiencias y garantizar que todos los ciudadanos tengan acceso a una atención médica digna y efectiva. La comunidad espera respuestas y soluciones inmediatas para mejorar las condiciones de este vital centro de salud.