Santo Domingo, 11 nov (EFE). – Los 48 pasajeros de un avión de la aerolínea estadounidense Spirit Airlines, que fue alcanzado por disparos mientras se aproximaba a Puerto Príncipe, Haití, esperan en el Aeropuerto Internacional del Cibao, en Santiago, República Dominicana, la llegada de otra aeronave para continuar su viaje, informaron fuentes de la terminal a EFE.
El vuelo 951 de Spirit Airlines había despegado esta mañana desde el Aeropuerto Internacional de Fort Lauderdale-Hollywood (FLL) con destino a la capital haitiana, pero debió abortar el aterrizaje tras recibir varios impactos de bala. Imágenes en redes sociales muestran al menos dos impactos de proyectiles en el avión, lo que motivó la desviación de su ruta hacia República Dominicana, donde aterrizó sin problemas a las 12:33 hora local (16:33 GMT).
Fuentes de la Dirección Nacional de Control de Drogas (DNCD), que se encontraban en el aeropuerto de Santiago, confirmaron que el avión aterrizó de emergencia de forma segura. Se espera la llegada de un segundo avión desde Fort Lauderdale para trasladar a los pasajeros de regreso a Estados Unidos.
Un asistente de vuelo sufrió heridas leves y está siendo evaluado por personal médico, mientras que la aerolínea ha confirmado que ningún pasajero resultó herido. Spirit Airlines declaró que “la seguridad de nuestros pasajeros y miembros del equipo es nuestra máxima prioridad” y ha suspendido temporalmente sus vuelos a Puerto Príncipe y Cabo Haitiano.
American Airlines y JetBlue también anunciaron la suspensión de sus vuelos a Haití hasta el jueves debido a la situación de violencia y tensión política en el país. Este lunes, se espera que Alix Didier Fils-Aime asuma el cargo de primer ministro, en medio de una creciente amenaza de violencia por parte de la principal coalición de pandillas, Vivre Ensemble.
De acuerdo con la Oficina Integrada de las Naciones Unidas en Haití (Binuh), entre julio y septiembre pasados al menos 1,223 personas murieron y 522 resultaron heridas debido a la violencia en el país. La ONU también informó que en el primer semestre del año se registraron cerca de 3,900 víctimas, entre muertos y heridos, a medida que la situación de seguridad continúa deteriorándose.