Por: Jhangeily Durán
Santo Domingo.- A casa llena, en un espectáculo donde el público cantó, bailó, saltó y hasta lloró, se presentó el icono urbano Bad Bunny, quien ofreció la noche del viernes el primero de dos show en Santo Domingo, en el que compartió con su colega y compatriota Rauw Alejandro y dio un espaldarazo al novel urbano dominicano Angel Dior.
El concierto del cantante puertorriqueño fue sazonado por la algarabía, un estadio Olímpico repleto de unas 40 mil personas y un vuelo con escalas, donde los dominicanos atravesaron por diferentes paradas: perreo intenso, un viaje al Bad Bunny de 2016 y los bailes al ritmo del mambo.
La espera por la entrada del “Conejo malo” a tarima había sido larga, puesto que el evento estaba sujeto a iniciar a las 8:00 de la noche del viernes, y fue al filo de las 9:50 de la noche, cuando en el estadio solo se escuchaban los gritos de una fanaticada emocionada producto de ver el urbano decidió salir a escena.
Con el estilo diferente que lo caracteriza, subió a la tarima con una camiseta tejida y unos pantalones anchos, se sentó en una silla, abrió su neverita y sacó la primera Presidente de la noche, tal y como si estuviera en una playa de Quisqueya.
Luego de dos tragos largos, comenzó a escucharse la pista de su canción «Moscow Mule», la cual de inmediato provocó que los presentes cierren los ojos y coreen la canción, como si estuviesen deseando que precisamente esa fuera con la que habría la noche.
Dos canciones después, el intérprete de “x100pre” le ofreció a los presentes su mejor sonrisa y dijo: “Buenas noches República Dominicana”. La respuesta fue desbordante, ya que más de un espectador gritó, “Te amo Bad Bunny”, y fue ahí donde el boricua comenzó a explicar lo importante que es este país para él.
“Ustedes no se imaginan cuánto extrañaba presentarme en República Dominicana, señores para mí esto es un honor, esta es mi segunda casa, no hay Bad Bunny sin Puerto Rico y República Dominicana, siempre lo dije y siempre lo diré”, dijo Benito Martínez, nombre real del popular urbano.
Sin pausar más, el estadio Olímpico Félix Sánchez, donde se realizó el show, vibró por todo lo alto cuando Benito entonó las primeras letras de su éxito «Yo perreo sola”, tema que el público disfrutó bailando hasta abajo, cantando a todo pulmón, grabando con sus celulares y viendo a unos 10 bailarines, tanto hombres, como mujeres, que salieron a escena a mostrar lo espectacular que es bailar solo.
“Mi gente no necesitan de una pareja para disfrutar el momento, perreen solas y solos que eso es un flow”, expresó Bad sobre la canción.
El reloj marcó las 10:15 pm cuando el público escuchó una voz diferente a la del Conejo, y se trataba del compatriota de la estrella de la noche, Rauw Alejandro, quien interpretó junto a Benito la canción “Party”.
Dentro de una pausa que tardó menos de diez minutos, el intérprete de “Todo de ti” se adueñó del escenario y coreo con los dominicanos, tres de sus más recientes temas, además se dar pista de que pronto vendría al país a dar un concierto.
“Los quiero mucho RD, ya verán que pronto nos veremos por aquí”, dijo Rauw.
Volvió a escena Bad, y los presentes, sin pedirlo, obtuvieron un pasaje gratis al 2016, cuando la música de exponente era solo trap.
“Caile», «Tú no metes cabra», «Soy peor» y «Diles”, fueron los trap que a pesar de no ser cantados completos, el urbano coreo mientras se desplazaba por el pasillo de la larga tarima colocada para el espectáculo.
La emoción de la gente era evidente, aunque muchos se quejaban, porque habían quienes se paraban en las sillas para poder ver mejor al urbano, lo que causaba molestias a otros presentes y llamaban a seguridad, pero estos no podían controlar la situación.
A las 11:30, con una sola pausa de menos de diez minutos, unas 11 canciones interpretadas y la misma ropa con la que salió a escena, el también productor musical se puso nostálgico y se colocó debajo de su palmera a cantarle de cerca al público, literalmente, la canción “Un ratito” y “Un verano sin ti”.
Al bajar de su palmera, con la que llegó volando casi a las gradas del estadio, Bad comenzó a interactuar con el público más estrechamente. Firmó unos tenis de un fanático, se agachó para darle la mano a quienes estaban en «front stage», subió a bailar a la dominicana influencer conocida como “La Kisty” y hasta expuso a la comunicadora Luz García, cuando le pidió darle un beso a un hombre que estaba a su lado, pero que parecía no ser su pareja amorosa.
Asimismo, pidió al público dos personas que le enseñen a bailar, pero tuvo estrictas condiciones para dejarlos subir.
“No es cualquier baile, quiero dos personas que bailen merengue, ripiao, bachata, dembow y sean dignos representantes”, manifestó Benito, pero todo era parte de la estrategia para introducir el dembowsero dominicana Ángel Dior, con quien cantó el tema “A I O”.
Eran las 12:30 y el exponente ya calculaba casi tres horas en escena, pero su seguía intacta, mientras se quitaba los tenis dijo: “RD gracias por apoyar mi música, gracias por todo, por conectar conmigo desde un inicio, no nos conocemos y a través de la música nos sentimos uno solo, eso es algo bien bonito” y ya descalzo camino en la tarima e introdujo la que sería su última canción de la noche.
“Esta canción se grabó, se creó y nació en RD, una patria que amo, no me cansaré decirles”, fue así como implantó la canción “El apagón”.
Una vez culminado ese éxito musical, perteneciente al álbum “Un verano sin ti”, Bad dio las gracias y se fue del escenario a las 12:40 de la madrugada del sábado, mientras en el cielo se veían los fuegos artificiales, el confetti en todo el estadio y sonaba un mambo que permaneció por unos nueve minutos.
Este sábado en la noche, Benito ofrecerá la segunda funcion en República Dominicana, bajo la producción de Gamal Hache y como parte de su gira «World Hottest Tour».
