Madrid (EFE).- El rey Felipe VI ha propuesto al líder del PP, Alberto Núñez Feijóo, como candidato a la investidura, a pesar de que sus 172 apoyos, que incluyen los votos de Vox, UPN y Coalición Canaria, son insuficientes para formar gobierno.
La presidenta del Congreso, Francina Armengol, ha anunciado la decisión del monarca una vez finalizada la ronda de consultas, en la que Felipe VI ha escuchado las posiciones de UPN, Coalición Canaria, el PNV, Sumar, Vox, PSOE y Partido Popular.
En la primera ocasión en la que dos candidatos buscaban ir a la investidura, el rey ha optado por proponer al que más respaldo tiene a día de hoy, pues el secretario general del PSOE, Pedro Sánchez, parte de 152 escaños (PSOE y Sumar) y debe coser pactos para lograr mayoría.
Feijóo agradece que el rey le proponga para la investidura
El líder del PP, Alberto Núñez Feijóo, ha agradecido hoy al rey Felipe VI su decisión de proponerle como candidato a la investidura para ser presidente del Gobierno y ha destacado que defenderá el cambio y la estabilidad, así como la “moderación” política.
“Daremos voz a los más de 11 millones de ciudadanos que quieren cambio, estabilidad y moderación con un Gobierno que defienda la igualdad de todos los españoles”, ha escrito Feijóo.
Se activa el reloj: ¿sesiones de investidura o elecciones?
La designación por parte de Felipe VI de Alberto Núñez Feijóo como candidato a presidir el Gobierno activa el reloj institucional de los plazos para la sesión o sesiones de investidura o, si fuera necesario, para la repetición de elecciones.
A efectos prácticos el hecho de que tras la primera ronda de contactos haya salido un primer candidato supone que comienzan a contar los únicos plazos que establece la Constitución una vez constituidas las nuevas Cortes.
En su artículo 99 la Carta Magna establece que si transcurrido el plazo de dos meses, a partir de la primera votación de investidura, ningún candidato obtiene la confianza de la cámara, el rey disolverá ambas cámaras y convocará nuevas elecciones, que se celebrarán 47 días después.
Sin embargo, la Constitución no dispone cuánto tiempo tiene que pasar entre que el rey propone candidato hasta que éste defiende su candidatura en el hemiciclo.
Armengol hablará con Feijóo para decidir la fecha
Es la presidenta del Congreso, Francina Armengol, la que deberá establecer la fecha de la investidura. Antes, como ella misma ha anunciado al comunicar el nombre del candidato, llamará a Feijóo para saber su opinión y tomar la decisión más adecuada.
Una fecha que es, de facto, la que marcaría el día a celebrar elecciones si fuera necesario repetirlas.
“Lo que me corresponde es hablar con el candidato, escuchar y ver sus razones y preferencias para enfocar ese debate, de lo que se trata es de poder facilitar las negociaciones”, ha destacado este martes justo después de volver del Palacio de la Zarzuela de reunirse con el rey.
Sobre cuál podría ser el día elegido por Armengol, el líder del PP ha dado alguna pista al defender tiempo para hablar, porque “hacer una investidura sin hablar con los grupos supondría un formato no parlamentario” e implicaría “desigualdad” respecto a otros aspirantes.
Armengol no ha querido pronunciarse sobre esta petición aunque si se ha mostrado dispuesta a facilitar las negociaciones.
Lo que sí estaría claro es que si se quieren dejar despejadas las navidades ante una hipotética convocatoria electoral el debate de investidura debería celebrarse la última semana de agosto o ya dejarlo para finales de septiembre.
Así se alejaría el peligro de unos comicios en fechas tan señaladas, una amenaza que ya se contempló en 2016 y obligó a modificar la ley electoral para reducir la campaña electoral de 15 a 8 días.
El rey propone a Feijóo por la “costumbre” de designar al candidato con más escaños
La Casa del Rey ha argumentado la decisión de Felipe VI de designar a Alberto Núñez Feijóo como candidato a la Presidencia del Gobierno pese a no contar con mayoría suficiente para su investidura en seguir con la “costumbre” de proponer al que haya obtenido más escaños en las elecciones generales.
En un comunicado, Zarzuela señala que salvo en la XI Legislatura (en la que Mariano Rajoy declinó ser candidato) en todas las elecciones democráticas el aspirante del grupo político con mayor número de escaños ha sido “el primero” en ser propuesto por el rey, una práctica que “se ha ido convirtiendo, con el paso de los años, en una costumbre”.
“En el procedimiento de consultas llevado a cabo por Su Majestad el Rey no se ha constatado, a día de hoy, la existencia de una mayoría suficiente para la investidura que, en su caso, hiciera decaer esta costumbre”, añade Zarzuela en la nota con la que informa de la decisión de Felipe VI.
Consciente por tanto de que, por ahora, Feijóo no cuenta con apoyos suficientes para una investidura exitosa, la Casa Real anuncia que, si el líder del PP fracasa en su intento, el rey “tramitará sucesivas propuestas”, de acuerdo con lo previsto en el apartado 4 del artículo 99 de la Constitución.
Y concluye que, como dicta la Carta Magna, “en ausencia del otorgamiento de esa confianza”, Felipe VI procedería a la disolución de las Cámaras y la convocatoria de nuevas elecciones generales, con el “referendo” de la presidenta del Congreso, Francina Armengol.