El cantante asistirá previsiblemente al enlace de su hija Michelle Salas, a la que reconoció oficialmente cuando la niña tenía 18 años, en la Toscana. Michelle se va a casar a partir de esta tarde con el millonario Danilo Diaz, que se lleva 14 años con ella, en unos fastos que durarán tres días.
Díaz es fundador de la compañía Toys for Boys, fundada en 2013. Esta empresa se dedica a la distribución de accesorios de alta gama, como coches de lujo y joyería.
Aunque se especuló con que el artista mexicano no iría a la boda, parece que finalmente sí lo hará, incluso acompañado de su amor español, Paloma Cuevas, con quien lleva unos meses de intensa relación.
Lo que sí ha trascendido es el regalo que el llamado Sol de México ha hecho a su hija: unas joyas adquiridas en una selecta tienda de Italia hechas de brillantes y zafiros y de brillantes y oro blanco. En total, dos pares de aretes y de pendientes, donde es probable que el criterio de Paloma Cuevas, muy relacionada con este mundo, haya imperado.
La hija de Luis Miguel, influencer, ‘sumará’ a la familia otra fortuna, además de la que tiene su padre, calculada en torno a los 180 millones de dólares. La de su propio marido, considerado archimillonario gracias a sus negocios y empresas.
Esta boda aliviará las noticias que están llegando sobre la posible aparición de la madre del cantante, Marcela, cuyo rastro se perdió cuando Luis Miguel tenía 16 años.