Río de Janeiro (EFE). – El secretario general de la ONU, António Guterres, manifestó este domingo, en Río de Janeiro, su “preocupación” por el estado de las negociaciones en la cumbre climática de Bakú (COP29) y demandó a los países del G20 “liderazgo” y “compromiso” para alcanzar un “resultado satisfactorio”.
“Me preocupa el estado de las negociaciones en la COP29. Los países deben acordar un objetivo ambicioso de financiación para el clima que esté a la altura de la magnitud del reto al que se enfrentan los países en desarrollo”, señaló Guterres en una rueda de prensa, en la víspera de la reunión del G20.
Reconoció que las negociaciones en Bakú están “lejos” de llegar a buen puerto y advirtió que no alcanzar un consenso tendría consecuencias “negativas” para la COP30, que se celebrará en 2025 en la ciudad de Belém, en la Amazonía brasileña.
En este contexto, recordó que el G20, que reúne a las economías más poderosas del planeta, son responsables por “el 80 % de las emisiones mundiales” contaminantes y, por ello, “deben predicar con el ejemplo”.
De esta forma, consideró que “todos los países del G20 deben hacer un esfuerzo adicional” en sus metas climáticas y puso como ejemplo de un “buen comienzo” los recientes anuncios de “Brasil y Reino Unido”, ambos miembros del G20.
“Apelaré al sentido de la responsabilidad de todos los países del G20. Ha llegado el momento de que las mayores economías y emisores del mundo lideren con el ejemplo. El fracaso no es una opción”, avanzó.
Y es que, según alertó, “2024 será probablemente el año más caluroso de la historia”, a lo que hay que sumar que, con las políticas climáticas actuales, el mundo se asoma “a un desastroso aumento de la temperatura de 3,1 grados (Celsius) para finales de siglo”.
Guterres pide al G20 “dar un paso adelante” por la paz
António Guterres pidió a los líderes del G20, que se reunirán el lunes y martes en Río de Janeiro, “dar un paso adelante” por la paz en la Franja de Gaza, Líbano, Ucrania y Sudán.
Los países del G20 ejercen una “enorme influencia diplomática” y “deben utilizarla para abordar los principales problemas mundiales. En primer lugar, la paz” porque mientras “las guerras continúan, la gente está pagando un precio horrible”, dijo en una rueda de prensa en Río.
Guterres demandó así a los jefes de Estado y de Gobierno del G20, que reúne a las mayores economías del planeta, abordar los grandes conflictos en curso, algo que ha rechazado de forma tajante Brasil, que ejerce la presidencia rotativa del foro hasta el próximo 30 de noviembre, cuando pasará a Sudáfrica.
Coordinación económica
Brasil sostiene que el G20 surgió como un mecanismo de coordinación económica y, por esta razón, no es la instancia adecuada para la prevención y resolución de conflictos, algo que, a su juicio, le compete a la ONU.
De hecho, la Presidencia brasileña ha organizado tres plenarias para la cumbre del G20 sobre cómo erradicar el hambre en el mundo, la reforma de las instituciones internacionales y una última sobre transición energética y desarrollo sostenible.
Sin embargo, Guterres instó al G20 a “dar un paso adelante por la paz”, en concreto en Gaza y Líbano, objeto de bombardeos e invasiones del Ejército israelí, así como en Ucrania, bajo fuego ruso desde hace cerca de tres años, y Sudán.
De Gaza, insistió en la necesidad de “un alto el fuego inmediato, la liberación inmediata de todos los rehenes” capturados por la milicia islamista palestina Hamás y “el inicio de un proceso irreversible hacia una solución de dos Estados”.
Sobre el Líbano, pidió igualmente el fin de las hostilidades y caminar de forma significativa “hacia la plena aplicación de las resoluciones del Consejo de Seguridad”.
De Ucrania, urgió a “respetar la Carta de las Naciones Unidas, las resoluciones de la ONU y el derecho internacional”.
Sobre Sudán, alertó de “la espantosa violencia y la desesperada crisis humanitaria que se está desatando entre la población civil”.
“En todas partes, la paz requiere acciones basadas en los valores de la Carta de la ONU, el Estado de derecho y los principios de soberanía, independencia política e integridad territorial de los Estados”, sostuvo Guterres.
La agenda de Guterres en COP29 y G20
El secretario general de la ONU ha viajado desde Bakú a Río de Janeiro (Brasil) para participar en la cumbre de jefes de Estado y de Gobierno del G20, que se celebra el lunes y martes en la capital fluminense.
Después, pretende volver a la capital azerbaiyana para la clausura de la COP29, donde crece la desconfianza sobre la posibilidad de alcanzar acuerdos en materia de financiación.
Para Guterres, que ha situado la crisis climática como una de sus grandes prioridades de su agenda, “un objetivo ambicioso y creíble” es “crucial para crear confianza entre los países desarrollados y en desarrollo”.
“El G20 debe predicar con el ejemplo. Esto es fundamental para restaurar la confianza, la credibilidad y la legitimidad de todos los gobiernos y de nuestro sistema mundial en estos tiempos turbulentos”, completó.
Fuente: EFE