Caracas.- El líder opositor y jefe de la Asamblea Nacional Juan Guaidó exhortó a la comunidad internacional y a los venezolanos a rechazar de manera contundente los comicios legislativos previstos para el domingo en Venezuela, señalando que con ellos se busca aniquilar a la oposición.
“No le va a generar ningún tipo de reconocimiento ni legitimidad” al gobierno del presidente Nicolás Maduro, dijo Guaidó en una rueda de prensa el sábado.
“Nos estamos jugando en Venezuela la existencia de una alternativa democrática”. Guaidó y sus aliados decidieron boicotear las elecciones con el argumento de que no existen condiciones para unas elecciones libres y democráticas en la nación sudamericana.
“El llamado hoy a la comunidad internacional” y a los venezolanos es a “ratificar el rechazo al fraude, el rechazo al intento de burlar una vez más la democracia en Venezuela”, subrayó el dirigente opositor, al tiempo en que exhortó a los venezolanos a quedarse en casa el domingo.
Guaidó, invocando sus atribuciones como presidente de la Asamblea Nacional, se declaró presidente interino en 2019 en desafío a Maduro y fue reconocido por Estados Unidos y más de 60 países al considerar que Maduro ganó la elección mayo del 2018 de forma fraudulenta luego de inhabilitar a rivales más populares y a varios partidos opositores.
Pese a ese apoyo internacional y la impopularidad del gobernante, Guaidó no ha podido poner fin al mandato de Maduro.
En el 2015, los adversarios de Maduro ganaron la Asamblea Nacional, alcanzado una mayoría que le fue esquiva durante 16 años de gobiernos socialistas de Maduro y su predecesor Hugo Chávez.
Acto seguido, Maduro se dedicó a minar al poder legislativo y a privarle de sus facultades utilizando para ello a otros poderes judiciales y electorales afines.
En junio, el Tribunal Supremo de Justicia suspendió las directivas de los partidos opositores Acción Democrática, Voluntad Popular y Primero Justicia y entregó la jefatura, activos y los símbolos de esas fuerzas a disidentes, quienes contrariamente a la postura de sus líderes históricos respaldaron la realización de la elección de un nuevo Legislativo. Los analistas coinciden en que la oposición, ahora dividida, se encamina a sufrir probablemente un aplastante revés.
Guaidó aseguró que se mantendrá en el país, pese a considerar que él y sus aliados enfrentarían una “peor persecución” política. Muchos dirigentes opositores han abandonado el país, particularmente en los últimos siete años.
“Mi situación geográfica a partir del 5 de enero va a ser en Caracas“, aseguró Guaidó, en referencia a la fecha establecida en la constitución para la instalación de una nueva Asamblea Nacional. “Asumo los riesgos“.