Santo Domingo. – La Dirección de Persecución del Ministerio Público ha inmovilizado varias propiedades y empresas vinculadas al empresario Antonio Espaillat, propietario de la discoteca Jet Set, donde el pasado 8 de abril colapsó el techo del establecimiento durante una fiesta, causando la muerte de 232 personas y dejando a más de 180 heridas.
Entre las empresas bajo medida cautelar figuran Inversiones E y L SRL, Jet Set Club, entre otras propiedades que, según informaciones recibidas por las autoridades, estarían en proceso de ser transferidas, lo que motivó al órgano persecutor a intervenir.
Precisó que esto no implica que se le esté investigando por lavado de activos, sino que se utiliza esa figura jurídica para que, de manera administrativa, se pueda poner un “stop” a cualquier transacción sobre la propiedad de las empresas y bienes vinculados a Espaillat.
Estas acciones forman parte de las “diligencias procesales” que lleva a cabo la Procuraduría General de la República con el objetivo de preservar los bienes mientras se desarrolla la investigación, la cual busca determinar si hubo negligencias, fallas estructurales o responsabilidades legales en el siniestro.
Las oposiciones a traspasos se realizaron amparadas en disposiciones de la Ley 155-17 sobre Lavado de Activos, que permite a las autoridades actuar preventivamente para evitar movimientos de capital o bienes, aunque no implica una acusación formal por lavado en contra de Espaillat.
El empresario ha declarado públicamente su disposición a colaborar con las autoridades, sin embargo, el Ministerio Público ha intensificado la revisión de la documentación legal, licencias, seguros y condiciones estructurales del centro nocturno.
Una fuente vinculada al caso explicó que estas medidas tienen el objetivo de garantizar posibles compensaciones a las víctimas y asegurar que los responsables puedan enfrentar las consecuencias civiles y penales que puedan derivarse del proceso.