Un video grabado por las cámaras de los agentes que realizaron la última de las cuatro visitas de la policía a la casa de William Levy y Elizabeth Gutiérrez evidencia la fuerte tensión que hay entre la pareja de actores, cómo su separación ha afectado a su hija, Kailey, y la situación económica que parece estar atravesando la también presentadora.
La grabación divulgada este jueves por el programa El gordo y la flaca (Univision) registra la visita efectuada por la policía de la ciudad de Davie, en el sur de la Florida, al hogar de los actores el pasado 2 de marzo, luego de que Gutiérrez llamara a las autoridades.
Para entonces la pareja ya estaba separada. Kailey vivía con su mamá en un apartamento y el hijo mayor, Christopher, seguía en la casa familiar con su papá.
Según aparece en el informe policial de la visita y en la conversación captada por el video, la actriz dice que cuando llegaron a la casa para recoger ropa de Kailey, la adolescente encontró que su papá estaba con otra mujer cuando golpeó la puerta del dormitorio principal y que él la empujó cuando no quiso que viera quién era.
Gutiérrez en todo momento permaneció en el exterior de la vivienda, que es donde se encuentra con los agentes que responden a su llamada.
“Está en mi casa y hay otra mujer ahí”, dice Gutiérrez a la pareja de policías. “[Levy] ha metido algo y tiene una mujer ahí”. De fondo, en la puerta de la casa, se oye al cubano pidiendo que lo dejen en paz, a lo que Kailey contesta: “No, tú déjanos en paz”.
Gutiérrez insiste en que su expareja debe estar bajo la influencia de alguna sustancia y señala que ellas se quedaron en el carro esperando a los agentes para que sacaran a la mujer que supuestamente estaba en la casa con el actor.
Pide a los agentes que loa acompañen adentro para ver de quién se trata, pero los uniformados le responden que no pueden complacerla.
“Quiero verla, es mi casa y es mi papá”, insiste Kailey, quien repite a los agentes que vio a una mujer cuando trató de entrar al dormitorio en el que estaba su padre. “Vi una chica, vi sus piernas corriendo y él me decía; “No soy como tu mamá”.
Gutiérrez también les explica que no tiene comunicación alguna con su ex. “Lo tengo bloqueado [en el teléfono} porque siempre me está insultando, piensa que estoy con otro”.
Los agentes finalmente entran en la casa acompañados de Levy, quien califica de “locura” la situación. Pero lo que pasa dentro no puede ser compartido porque ocurre dentro de una vivienda privada, según El gordo y la flaca. Una vez salen de nuevo los agentes, le dicen a Gutiérrez y a la niña que no hay nadie.
En un momento de la conversación, cuando los agentes mencionan el hecho de que Kailey se está viendo afectada por el enfrentamiento entre sus padres, la actriz mexicoamericana señala que su hija pequeña está al tanto de lo que ha sucedido en la relación de sus padres.
“Ha pasado por muchas cosas, ha visto muchas cosas”, dice. “No está bien, ha tenido que crecer muy rápido porque yo lo bloqué [en el teléfono] y él le envía mensajes a [Kailey] y [por eso] está involucrada, desafortunadamente”, apunta.
También les explica que decidieron que fuera la menor la que entrara a la casa por temor a la reacción de Levy. “Ella trata de protegerme porque sabe cómo me tocaría y que no lo haría con ella. Si entro en una confrontación con él, me tocará. Ella no quiere que eso suceda, porqué sabe lo que es eso y no quiere que pase”.
En otro momento, Gutiérrez se sincera sobre la aparente mala relación de Levy con su hija. “Lo vemos dos veces por semana en el juego de pelota y ni siquiera la mira, no habla con ella, no la llama, no le envía mensajes para preguntarle si ha comido, si está bien, si necesita dinero”.
Por eso se indigna cuando en la conversación sale a relucir la llamada a la policía que había hecho Levy la noche anterior para exigir saber dónde estaba Kailey. Esa llamada origina una de las cutro visitas de las autoridades a la casa.
“Así que llama a las 11 de la noche para saber cómo está su hija”, dice Gutiérrez. “Obviamente se ha metido algo. Se pone loco los fines de semana porque se piensa que yo hago lo que él hace, y se pone loco”.
Asimismo, la también presentadora deja entrever que están pasando apuros económicos porque aparentemente Levy la ha dejado sin nada. “Estoy viviendo de lo que me da mi familia”, cuenta. “Estoy en un auto alquilado, esa es la situación en que me encuentro”.
La historia de amor de más de dos décadas de Levy y Gutiérrez ha tenido altas y bajas, además de verse afectada por rumores de supuestas infidelidades. Los actores se conocieron mientras concursaban en el reality show Protagonistas de telenovela en 2002. El flechazo se dio casi de inmediato y al poco tiempo iniciaron un idilio, que dio como resultado el nacimiento, en marzo de 2006, de su primogénito Christopher Alexander. Cuatro años después dieron la bienvenida a Kailey.
