EFE. – La presidenta Dina Boluarte está más cerca de la vacancia. Pero no fue por los cincuenta muertos de las protestas contra su toma de Gobierno, sino por el sonado caso de los Rolex, el que ahora tiene un nuevo desarrollo luego de que la Fiscalía allanara su vivienda buscando estos artículos de lujo. ¿Cómo empezó este caso y cuáles son las implicancias tras estos relojes de lujo de la Presidenta?.
La controversia se desató el 14 de marzo, tras un informe de La Encerrona, realizado por Ernesto Cabral, donde se analizaron miles de fotografías de Boluarte desempeñándose como ministra y, desde el 7 de diciembre de 2022, como jefa de Estado, revelando la posesión de una amplia colección de relojes, algunos de ellos de lujo y no declarados ante el Jurado Nacional de Elecciones (JNE). Se menciona que varios de los Rolex que utiliza fueron identificados como fabricados recientemente, basándose en características específicas.
Asimismo, por su lado, el periodista Alonso Ramos reveló que el Gobernador Regional de Ayacucho, Wilfredo Oscorima, visitó el despacho presidencial el mismo jueves 14 de marzo, en la fecha en que se reveló el escándalo de los Rolex de la mandataria. Oscorima enfrentó acusaciones en el pasado por obsequiar relojes de alta gama a dos jueces de la Corte Superior de Justicia de Huamanga, supuestamente a cambio de beneficios. En 2014, el Congreso le abrió una investigación relacionada con posibles conexiones con el narcotráfico. Al año siguiente, se le dictó sentencia por actos de corrupción. Tras estar prófugo durante nueve meses, fue capturado y encarcelado. En mayo de 2017, Oscorima fue puesto en libertad.
Fiscalía inicia diligencias
El lunes 18 de marzo, se iniciaron indagaciones preliminares por parte del Ministerio Público hacia Boluarte, bajo la sospecha de no haber informado sobre la posesión de relojes Rolex de lujo y por presunto enriquecimiento indebido.
Quien se encarga de esta investigación es la Fiscalía, a través de su División de Enriquecimiento Ilícito y Denuncias Constitucionales. Uno de los apuntes de esta entidad es que la presidenta no registró estos bienes en su declaración de propiedades ante el JNE.
La respuesta de Boluarte
El pasado viernes 22 de marzo, tras una semana de cuestionamientos que llegaron inclusive a medios internacionales, e mostró dispuesta a presentarse ante la Fiscalía para esclarecer las acusaciones en su contra, negando tener irregularidades en su patrimonio. “Ya notificada por el Ministerio Público, he dirigido a mis abogados al caso. Confrontaré este proceso con la verdad, tanto frente a la autoridad como a todo el país”, aseguró la mandataria ante la prensa.
Previamente, había explicado que los bienes en cuestión, incluyendo un Rolex valorado en aproximadamente US$ 14 mil son antiguos y fruto de su trabajo. Desde el Ejecutivo, ha ahbido una clara defensa de Boluarte. El presidente del Consejo de Ministros, Gustavo Adrianzén, declaró el domingo que la presidenta no presenta desbalance patrimonial, interpretando la situación como un distractor político que perjudica la estabilidad nacional.
Las movidas desde el Congreso
Ya desde el 20 de marzo el partido Perú Libre, que llevó a Boluarte como vicepresidente junto a Pedro Castillo y en el cual la actual presidenta ha militado desde su creación, inició una recolección de firmas para la moción de vacancia.
Por su parte, Fuerza Popular, el partido con mayor representación en el dividido Congreso, expresó su preocupación por los “escándalos” que rodean al gobierno a través de un comunicado, instando a que se proporcionen los esclarecimientos necesarios sobre el origen de los relojes en cuestión.
El allanamiento a su vivienda
Desde el martes 26 de marzo, Boluarte no se pronuncia ni aparece en medios. Así, equipos del Ministerio Público y de la Diviac llegaron alrededor de las 11 p.m. del viernes 29 de marzo al domicilio de Boluarte para allanamiento de la vivienda de la mandataria por el caso de los Rolex.
Tras esto, la Presidencia del Consejo de Ministros (PCM) se reunión de emergencia en las primeras horas del sábado 30 de marzo luego de conocerse la noticia. Posteriormente, el Primer Ministro, Gustavo Adrianzén, se pronuncio en medios: “En todo momento se han brindado las facilidades, se ha apersonado, se ha acreditado su abogado y en pleno ejercicio de su derecho a la defensa, ha pedido una reprogramación, ¿por qué demonizan aquello?, ¿qué tiene de malo?, ¿qué tiene de ilegal?, nada”, declaró.
Tras esto, Carlos Anderson, congresista de Podemos Perú, señaló en su cuenta de Twitter que “si la sra. Boluarte no sale a dar explicaciones y entrega los relojes y demás joyas requeridas por la Fiscalía, entonces será mejor que simplemente renuncie antes de que el Congreso la vaque por incapacidad moral permanente”.
Por su lado, Jorge Montoya, de Renovación Popular calificó el allanamiento de “teatro político”. “La criticable irrupción del Ministerio Público y Diviac en la residencia de la presidenta, en el caso Rolex, podría haberse evitado si ella hubiera optado por la transparencia. Esta exagerada medida, montada antes de una votación trascendental como el ‘voto de confianza’, evidencia el abuso del poder de la Fiscalía y la opacidad en su gobierno. Es crucial exigir responsabilidad y ética en la gestión de los asuntos públicos”.
Sin embargo, su compañero de bancada, Alejandro Muñante, escribió en Twitter: “Invoco a las fuerzas democráticas del país a no cambiar la vara de medición, si fuimos implacables con Castillo y sus múltiples acusaciones de corrupción, seámoslo también ahora”.