Estados Unidos recalcó este viernes que Irán no debe supeditar la reimplementación del acuerdo nuclear a las investigaciones abiertas por parte de la agencia nuclear de la ONU sobre Teherán en virtud del Tratado de no proliferación.
“No debería haber ninguna condicionalidad”, apuntó en rueda de prensa la portavoz de la Casa Blanca, Karine Jean-Pierre, un día después de haber recibido las últimas condiciones que Irán ha planteado para poder cerrar un acuerdo.
Estados Unidos ya había solicitado el martes a Irán que no condiciora el regreso al pacto nuclear de 2015 a que la agencia nuclear de la ONU cierre la investigación que lleva a cabo sobre las trazas de uranio no declaradas por Teherán.
“Por supuesto, sería preferible volver al acuerdo sin ninguna cuestión de salvaguardia abierta. El poder para lograrlo está totalmente en manos de Irán”, añadió la portavoz, según la cual “si Irán está preparado para cumplir sus compromisos bajo el acuerdo de 2015”, Estados Unidos está dispuesto a “hacer lo mismo”.
Irán negocia desde hace 16 meses con Alemania, Francia, el Reino Unido, Rusia, China y, de forma indirecta, con Estados Unidos la restauración del acuerdo nuclear de 2015, que limitaba el programa nuclear iraní a cambio del levantamiento de sanciones y que abandonó en 2018 el entonces presidente estadounidense, el republicano Donald Trump.
La pasada madrugada, Teherán envió a Washington sus consideraciones acerca del texto final propuesto por la Unión Europea, intermediaria en las negociaciones, una respuesta que EE.UU. calificó de “no constructiva”.
La portavoz del Consejo de Seguridad Nacional de la Casa Blanca Adrienne Watson dijo este viernes a Efe que Estados Unidos está estudiando la respuesta de Teherán, pero no quiso dar detalles sobre su contenido.
Afirmó que durante las última semanas “se han resuelto algunas diferencias, pero otras permanecen”, y prometió que el presidente estadounidense, Joe Biden, solo firmará un acuerdo que “redunde en los intereses de seguridad nacional” de su país.