Puerto Rico.- Los abogados de Seis y Once Corp. (SOC), empresa de la que es accionista y directivo Donald Guerrero en Puerto Rico, presentaron el pasado 26 de mayo una contestación formal a la demanda introducida por Eduardo Pellerano en marzo pasado en los tribunales de la vecina isla. En el documento se desmontan cada una de las acusaciones vertidas contra Guerrero y algunas de sus empresas, entre ellas Autogermana, de la que ambos son accionistas.
Además, de su contenido se extrae un estado de deudas de Pellerano con dicha compañía que asciende a una cifra cercana a los US$10 millones. La defensa reclama que el tribunal reconozca el derecho de sus clientes a cobrarlas.
El documento presenta datos que dan cuenta de que una parte de esa deuda, unos 7 millones de dólares, corresponde a montos no devueltos sobre adelantos a los dividendos a ser generados por sus acciones en Autogermana. En otros informes contables que maneja la empresa, consta que ascendió a alrededor de US$28.5 millones el total de lo que se benefició Pellerano entre adelantos y gastos personales cubiertos por la empresa entre 2008, cuando SOC entró en Autogermana, y 2019. Luego de una auditoría al respecto, se le pidió que presentara un plan de pago y no ofreció ningún compromiso para saldar su deuda.
Otra situación que se plantea en el documento de defensa data de 2011, cuando se explica que Pellerano usó a Autogermana como garante de 2.3 millones de dólares, balance de deuda remanente del financiamiento otorgado para la compra de un avión privado, el cual fue compelido a vender por debajo de su valor. A mayo de 2021, todavía le adeudaba al 1st Source Bank en Estados Unidos US$1.7 millones. La defensa de SOC alega que Pellerano comprometió a Autogermana como garante sin hacerlo del conocimiento de su Junta de Directores.
En 2017, reincidió y colocó a la compañía como garante de un préstamo de seis millones de dólares firmado con el Banco de Reservas (Banreservas) sin que, de nuevo, la Junta de Directores lo supiera. El préstamo fue para Autogermánica, empresa de Pellerano en República Dominicana que representaba a BMW en el país y cuya representación perdió hace pocos años. Autogermánica incumplió con sus obligaciones y Banreservas inició reclamaciones de pago en 2018. Para liberarse de sus obligaciones con el banco, Autogermana acordó el pago de casi 1.9 millones de dólares.
Alegatos contra acusaciones
En la contestación a la demanda, se demuestra que el actuar del ex propietario de Listín Diario al frente de Autogermana la llevó a una quiebra técnica. “La pérdida durante el año 2007 fue de US$2.3 millones, mientras simultáneamente, y por instrucciones de Pellerano, eran sufragados gastos de avión privado y lanchas, entre otros”, se afirma en el documento, donde también se dice que “Pellerano incurrió en gastos personales de alrededor de US$2.1 millones mientras la compañía se encontraba en esta precaria situación”.
Como consecuencia de esto, en 2008, Westernbank y BMW North America intervinieron Autogermana y Pellerano tuvo que entregar al banco la totalidad de sus acciones en garantía. Llegados a ese punto, los abogados dan cuenta en la contestación a los tribunales de que fue Eduardo Pellerano quien pidió a Donald Guerrero que lo auxiliara. “Le pidió que lo ayudara a sacar la compañía adelante. Pellerano necesitaba un socio que aportara capital y, además, le ayudara a corregir las serias deficiencias gerenciales que tenía Autogermana”.
Fue así que en noviembre de 2008, Guerrero realizó una inversión de algo más de dos millones de dólares y asumió, a requerimiento de los bancos, la gestión del negocio. Este hecho, además, permitió a Pellerano recuperar sus acciones, de las que se sigue beneficiando hasta el día de hoy gracias a que el cambio de rumbo dado por la intervención de Guerrero al negocio le ha permitido presentar buenos resultados económicos de manera sostenida a lo largo de estos últimos años y obtener el reconocimiento de BMW North America como gestión modelo y “Center of Excellence”.
Historial deudor
En una respuesta anterior que los abogados de Axis Holding y SOC habían hecho al tribunal, repasaban la historia empresarial de Eduardo Pellerano. “Don Rogelio fue el padre de Pellerano y, además, uno de los dueños del Listín Diario”. Explicaban que, luego del fallecimiento de don Rogelio Pellerano, en 1992, su hijo Eduardo Pellerano asumió el control del periódico hasta que en el año 2000 “se vio obligado a venderlo debido al gran endeudamiento al que lo llevó (…), resultado de los altos costos en que incurrió en las sucesivas acciones judiciales que incoó para separarse, primero de la familia Reid Cabral, luego de su tío y su primo, Máximo y Arturo Pellerano, y posteriormente de su madre y su hermana, Rocío Nadal viuda de Pellerano y Rocío Pellerano Nadal”.
La moción de entonces mencionaba que “la efímera estadía de Pellerano al mando del Listín Diario, el cual fue propiedad de la familia Pellerano por más de 100 años, refleja su imprudencia en el manejo de los negocios y su incapacidad para respetar una relación de socios”.