El Segundo Juzgado de la Instrucción del Distrito Nacional impuso grillete electrónico como medida de coerción adicional a Marisol Franco, pareja del presunto narcotraficante César Emilio Peralta (César el Abusador).
Además de esta medida cautelar, la imputada de lavado de activos todavía debe cumplir arresto domiciliario e impedimento de salida.
La jueza Patricia Padilla acogió parcialmente la solicitud de la Fiscalía del Distrito Nacional, que había pedido prisión preventiva en contra de Franco por alegadamente haber violado los protocolos del arresto domiciliario al salir de su residencia sin autorización judicial.
Al terminar la audiencia de revisión de medidas coercitivas, la fiscal titular del DN, Rosalba Ramos, anunció que estudiarán las motivaciones del fallo de la jueza para decidir si apelarán la decisión.
Al ser trasladada fuera de la sala de audiencias, Franco se limitó a decir que “era que mis hijos estaban enfermos”.
Su abogado, Joaquín Benezario, afirmó que ella salió por una “causa de fuerza mayor” tras presentársele una emergencia médica de sus hijos y que ella presentó constancia de ello ante el tribunal.
Añadió que, no obstante, el juzgado impuso el grillete electrónico para “dar tranquilidad a Ministerio Público”.