El Ministerio Público de Santo Domingo Este confiscó 119 hookahs, así como accesorios para su uso y reparación, en los bares Ethika y Euphoria, a través de operativos de inspección, de manera simultánea, en centros de diversión de la avenida Venezuela, en el ensanche Ozama.
El propietario de Ethika deberá pagar una multa de 100 mil pesos por comercializar y permitir el uso de esos dispositivos de manera ilegal. En el caso de Euphoria será de 150 mil por ser la segunda ocasión que las autoridades se incautan las llamadas también pipas de agua, según el fiscal titular de Santo Domingo Este y Norte, Milcíades Guzmán Leonardo.
Una comunicación de prensa sobre los operativos, en cumplimiento con la Ley 16-19, que prohíbe el uso de la hookah en lugares públicos y privados, dice que Guzmán Leonardo contó con la colaboración la Policía Nacional.
Los allanamientos, realizados en establecimientos de la concurrida avenida, contaron también con la participación del director técnico de la Fiscalía, Héctor Romero; el coordinador de las Fiscalías Comunitarias, José Iván Díaz López, y el fiscal Andrés Marte.
En el Club Ethika se incautaron 99 narguiles, además de materiales y accesorios para su uso, como 162 mangueras, 150 tazas, 23 tarros con tabaco y 24 cajas con 10 unidades de carbón cada una.
En cuanto al bar Euphoria, cuya administración había sido sancionada en un operativo similar en abril pasado, el Ministerio Público ocupó la cantidad de 20 hookahs, además de objetos para su preparación, como mangueras y tazas.
Al propietario de este establecimiento se le había impuesto una multa por 100 mil pesos, por lo que esta vez deberá pagar 150 mil pesos, por la reincidencia.
El magistrado Guzmán Leonardo recordó en un comunicado de prensa que la Ley 16-19, del 18 de febrero de 2019, prohíbe el uso de la hookah en lugares cerrados bajo techo, en espacios de uso colectivo públicos y privados y en vehículos destinados al transporte de pasajeros.
Entre las motivaciones de esta legislación, se destaca que el uso de estos artefactos incrementa la exposición, por tiempo prolongado, a sustancias tóxicas, como el monóxido de carbono, el sarro y el tabaco.
Indica que, al compartir las boquillas, se incrementa el riesgo de la transmisión de enfermedades, como la tuberculosis, el herpes labial, el cáncer del pulmón y la destrucción de los dientes por exposición al sarro. Añade que su uso se presta para que, además del tabaco, se inhalen sustancias prohibidas.